El reciente bloqueo de la carretera México-Puebla, que se prolongó por más de 50 horas la semana pasada, no solo dejó a cientos de camiones detenidos, sino que también generó una compleja situación para las empresas transportistas que buscan reclamar el cobro de sus pólizas de seguro por daños a las mercancías afectadas. Aunque la compensación es posible, el proceso puede extenderse desde seis días hasta dos meses, dependiendo de la rapidez y eficiencia con la que los transportistas puedan reunir y presentar la documentación requerida.
Un proceso que pone a prueba la paciencia
Verenice Mecalco Villa, Socia Responsable de Daños de Grupo Interesse, subraya que el tiempo que toma el cobro de estas pólizas está directamente relacionado con la prontitud con la que los asegurados pueden documentar el siniestro. Entre los documentos clave que deben recabarse se encuentran el talón del embarque, la factura que compruebe la propiedad de la mercancía, y la licencia del operador del vehículo. Aunque el proceso de ajuste es relativamente sencillo, la verdadera dificultad radica en la integración de estos documentos, un paso que puede demorar hasta dos meses en completarse.
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“El ajuste es sencillo, pero depende de la integración de los documentos, un proceso que puede llevar hasta dos meses, principalmente por falta de comunicación entre las áreas operativas y administrativas de las compañías transportistas”, explicó Mecalco Villa. Esta falta de comunicación interna puede ser un gran obstáculo, especialmente en situaciones de emergencia como la que se vivió durante el bloqueo, donde cada minuto cuenta para minimizar las pérdidas.
Coberturas y condiciones
Uno de los principales retos para los transportistas en situaciones como esta es comprender plenamente el alcance de sus pólizas de seguro. Las coberturas de las sumas aseguradas varían ampliamente, desde 500 mil pesos por embarque hasta 10 millones de pesos, dependiendo del tipo de mercancía, que puede incluir productos perecederos, ropa, electrónicos, entre otros. Sin embargo, para que un reclamo sea válido, es esencial que los transportistas conozcan y cumplan con las condiciones específicas de su póliza.
Por ejemplo, algunos seguros estipulan el tipo de embalaje que debe utilizarse, los horarios en los que se permite la transportación, y la obligatoriedad de utilizar carreteras de cuota. “Muchas veces los asegurados sufren frustración ante un reclamo que no está cubierto porque no han comprendido o nadie les ha explicado el alcance de las obligaciones o las condiciones que deben cumplir”, añadió Mecalco Villa.
Esta falta de claridad puede llevar a situaciones donde, a pesar de haber sufrido pérdidas, el reclamo sea rechazado por no cumplir con alguna de las condiciones establecidas en la póliza. En un mercado tan competitivo como el del transporte, donde cada error puede significar pérdidas millonarias, la educación y la asesoría adecuada sobre los alcances y limitaciones de las pólizas son cruciales.
Impacto variable según el tipo de mercancía
La naturaleza de la mercancía transportada también juega un papel fundamental en el resultado de un reclamo de seguro. Mecalco Villa explicó que, en el caso de bienes como refrigeradores o neumáticos, el bloqueo de más de 50 horas no necesariamente causará daños a los productos, por lo que un reclamo podría no ser procedente. En cambio, para bienes perecederos, el tiempo de detención podría afectar significativamente el estado de los productos, justificando así el cobro de la póliza.
“Además, en el seguro de transporte de mercancías sí se considera el cobro del seguro en cuestión por alborotos populares, pues eso interfirió en su cadena de frío”, señaló Mecalco Villa. Este tipo de coberturas son vitales para empresas que transportan productos sensibles, ya que la interrupción de la cadena de frío puede llevar a la pérdida total de la carga, lo que representa un golpe devastador para las finanzas de cualquier transportista.
La importancia de la preparación y la comunicación
El reciente bloqueo en la México-Puebla ha sido un recordatorio claro de los riesgos inherentes al transporte de mercancías en un país donde las manifestaciones y bloqueos son comunes. Para los transportistas, estar preparados con la documentación adecuada y comprender al detalle sus pólizas de seguro puede marcar la diferencia entre recuperar las pérdidas o enfrentarse a un proceso largo y frustrante sin garantía de éxito.
En un sector tan dinámico y volátil como el transporte, la agilidad y la proactividad no solo son ventajas competitivas, sino también una necesidad para sobrevivir en tiempos de crisis. La situación actual debe servir como un llamado de atención para que las empresas refuercen sus procesos internos y mantengan una comunicación fluida entre sus áreas operativas y administrativas. Solo así podrán enfrentar los desafíos que se presenten en el camino, minimizando el impacto de eventos imprevistos y asegurando la continuidad de sus operaciones.
Fuente: Plan Informativo
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