La industria del transporte de carga en México se enfrenta a una crisis severa debido a la antigüedad de sus unidades, especialmente en el segmento de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), que representan el 97% de los transportistas del país. Esta situación podría impactar negativamente en la capacidad de aprovechar las oportunidades del nearshoring.
La directora general de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Claudia Sánchez, señaló que el 43% de las flotas de transporte de carga en México tienen 20 años o más, lo que refleja una falta de renovación significativa. Este envejecimiento de las unidades ha llevado a un aumento en la siniestralidad en las carreteras, lo que pone en peligro la seguridad de los operadores y contribuye a un ambiente laboral menos saludable, ya que muchas de estas unidades carecen de aire acondicionado y emiten altos niveles de contaminación.
Además, solo el 10% de la flota total de camiones en el país tiene entre cero y cinco años, lo que dificulta cumplir con los compromisos de reducción de emisiones y sostenibilidad. La falta de financiamiento adecuado es otra barrera importante para las mipymes, con tasas de interés excesivamente altas y requisitos de garantía poco realistas.
También le puede interesar: El desafío de la eficiencia en el transporte
Sánchez enfatizó la necesidad de un mayor apoyo financiero, posiblemente a través de la Banca de Desarrollo, y la implementación de programas de renovación y chatarrización para mejorar la competitividad en logística. También destacó la importancia de la profesionalización de los operadores para garantizar un desempeño seguro y eficiente.
La inseguridad en las carreteras es otro desafío significativo para las empresas de transporte, con un aumento alarmante en los robos violentos. Esto ha llevado a un aumento del 18% en las primas de seguros, lo que ejerce una presión adicional sobre las finanzas de las pequeñas empresas.
La crisis en el transporte de carga mexicano presenta desafíos significativos que deben abordarse urgentemente para mantener la competitividad en un entorno económico cada vez más globalizado. La falta de renovación de las flotas, la escasez de financiamiento y la inseguridad en las carreteras son problemas que requieren soluciones efectivas y coordinadas entre el gobierno, las empresas y otros actores relevantes en la industria del transporte.
Add Comment