En el día a día de millones de ciudadanos, el transporte público se erige como una necesidad ineludible. Ya sea por practicidad, accesibilidad o simplemente por falta de alternativas, es la opción principal para movilizarse en las ciudades mexicanas. Sin embargo, para los habitantes de ciertos estados, este servicio es más que una conveniencia: se ha convertido en un desembolso significativo.
En el recorrido por los estados de México, se encuentran realidades diversas en cuanto al costo del transporte público. En la región noroeste, Baja California se destaca con tarifas que oscilan entre los 15.50 y los 18 pesos, aunque ofrece trasbordos gratuitos, según datos del Instituto de Movilidad Sustentable del Estado. Mientras tanto, en Nuevo León, los pasajes pueden alcanzar hasta los 17 pesos, colocándolo entre los más costosos del país. En Coahuila, el panorama no es muy diferente, con tarifas que van desde los 11 hasta los 15 pesos, situándolo en el tercer lugar de la lista de los estados con el transporte público más caro. Tlaxcala, por su parte, no se queda atrás, con precios que llegan hasta los 14 pesos, ubicándolo en el cuarto lugar en esta clasificación.
Pero, ¿qué hay del Estado de México? Con una tarifa mínima de 12 pesos, este estado no solo figura entre los más costosos, sino que también enfrenta el desafío de la percepción de inseguridad en el transporte público, según datos del Inegi. Esta combinación de altos precios y preocupaciones por la seguridad plantea un escenario desafiante para los habitantes de esta región.
Es importante señalar que, si bien estas tarifas pueden resultar onerosas para muchos usuarios, cada estado implementa diferentes políticas de descuentos para pasajeros preferentes y adultos mayores, lo que alivia en cierta medida la carga económica para estos segmentos de la población.
El transporte público en México se enfrenta a desafíos significativos, desde el alto costo hasta la percepción de inseguridad. Si bien es un servicio fundamental para millones de ciudadanos, es necesario que las autoridades y los organismos pertinentes trabajen en mejorar su accesibilidad, seguridad y costo, para garantizar que sea verdaderamente una opción viable y sostenible para todos.
Fuente: Somos News
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