El transporte internacional de carga en México está a punto de experimentar un cambio significativo. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) ha anunciado la creación de una nueva regulación que, por primera vez, tendrá carácter permanente para las empresas de Estados Unidos y Canadá que operan en las carreteras mexicanas. Este acuerdo, actualmente en revisión por la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), establece requisitos específicos para los choferes y detalles sobre las restricciones y permisos necesarios para operar.
Desde 2014, las operaciones intermitentes han permitido que cerca de 4,000 vehículos realicen servicios de transporte de carga entre México, Estados Unidos y Canadá sin necesidad de cambiar de camión, caja o conductor. Hasta marzo de 2022, 129 empresas estadounidenses y canadienses con 2,169 vehículos operaban en México bajo estas condiciones. En contraste, 70 empresas mexicanas operaban en Estados Unidos con 1,574 unidades y 1,675 choferes a finales de 2022.
La SICT ha subrayado la necesidad de una regulación permanente para proporcionar certeza jurídica a los transportistas. “Actualmente hay regulaciones en México sobre el autotransporte internacional de carga; sin embargo, ninguna de manera permanente, por lo que es necesario la implementación de un instrumento que instaure reglas y requisitos”, explicó la entidad.
También le puede interesar: ¿Seguridad en riesgo? La importancia de la protección en el transporte
El nuevo acuerdo abordará los requisitos para los choferes de empresas estadounidenses y canadienses, así como otros aspectos clave como las restricciones y la gestión de permisos. Esta medida no solo busca facilitar el comercio internacional, sino también responder a las preocupaciones de seguridad que han sido un punto de controversia, especialmente en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El TLCAN otorgó a los camiones comerciales mexicanos acceso pleno a cuatro estados fronterizos de Estados Unidos en 1995 y acceso completo a todo el país en 2000. No obstante, Estados Unidos no implementó estas disposiciones por preocupaciones de seguridad, lo que llevó a México a afirmar que tales acciones violaban los compromisos establecidos.
Actualmente, el comercio entre México y Estados Unidos implica la participación de tres transportistas diferentes: uno que lleva el remolque a las ciudades fronterizas de un país, otro que cruza la frontera, y un tercero que transporta la carga en el segundo país. La nueva regulación promete simplificar este proceso, eliminando la necesidad de múltiples transportistas y mejorando la eficiencia del transporte de carga internacional.
La implementación de esta normativa está prevista para proporcionar un marco claro y consistente que beneficiará a todos los actores involucrados en el transporte internacional de carga. Las empresas de transporte, los choferes y los reguladores deberán colaborar estrechamente para asegurar que esta transición sea exitosa y que se maximicen los beneficios económicos y operativos.
La nueva regulación representa un paso importante hacia la modernización y optimización del transporte internacional de carga en México. Al establecer reglas claras y permanentes, se busca fomentar una mayor fluidez en el comercio transfronterizo, mejorar la seguridad en las carreteras y garantizar una mayor certeza jurídica para los transportistas. Este avance, sin duda, marcará un antes y un después en el sector del transporte internacional en la región.
Fuente: El Economista
