El sector de transporte de mercancías en México se encuentra en un estado crítico. En los últimos años, el robo a transportistas ha ido en aumento, y las cifras son alarmantes: en 2023, se reportaron más de 7,000 incidentes, generando pérdidas estimadas de 70,000 millones de pesos. Las regiones más afectadas incluyen el Estado de México, Puebla y Guanajuato, donde los robos con armas de fuego y bloqueos en vías principales son una realidad constante.
La situación es insostenible. Estos delitos no solo perjudican a los transportistas, sino que también afectan gravemente la cadena de suministro, generando retrasos en las entregas y pérdidas económicas significativas. Las empresas de logística, que ya enfrentan una serie de desafíos operativos, ahora deben lidiar con la creciente amenaza del crimen organizado en las carreteras.
Ante esta crisis, se vuelve crucial adoptar tecnologías avanzadas que permitan mejorar la seguridad en el transporte de mercancías. Según un informe de Aleph, más del 70% de las empresas de transporte en México han comenzado a implementar soluciones tecnológicas como GPS y telemática vehicular. Estas herramientas no solo ayudan a reducir el riesgo de robo, sino que también mejoran la protección de conductores y cargas.
A nivel global, se prevé que el mercado de dispositivos GPS alcance los 9.85 mil millones de dólares para 2032. Este crecimiento es impulsado por la creciente demanda en el ámbito del transporte y la logística, donde tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la computación en la nube y el desarrollo de software están revolucionando la gestión de flotas y la seguridad vehicular.
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En México, el mercado de GPS y telemática está experimentando una tasa de crecimiento anual del 7.9%. La telemática vehicular, habilitada por el IoT, combina el GPS con sensores avanzados, permitiendo recoger información en tiempo real sobre la ubicación del vehículo, su estado y el comportamiento del conductor. Esta tecnología ofrece una gestión de flotas más segura y eficiente, algo vital en un país donde las condiciones del transporte son cada vez más complejas.
Carlos Valenciano, director general de Alai Secure, explica que “el IoT permite rastrear la ubicación de un vehículo en tiempo real, monitorear eventos como la apertura de puertas, controlar de manera remota la velocidad y comportamiento del conductor, y emitir alertas en caso de riesgo”. Estas funcionalidades refuerzan la seguridad de los conductores, vehículos y mercancías, y son esenciales para enfrentar la problemática actual.
Sin embargo, la adopción de estas tecnologías no es suficiente. Es necesario que las empresas de transporte trabajen en conjunto con las autoridades para crear un entorno más seguro. La colaboración entre el sector privado y las fuerzas de seguridad es fundamental para diseñar estrategias efectivas que reduzcan los índices de robo y mejoren la seguridad en las carreteras.
Además, las empresas deben considerar la capacitación de sus conductores en el uso de estas tecnologías y en la prevención de robos. Un conductor informado y preparado es la primera línea de defensa contra el crimen, y su seguridad es esencial para el éxito de las operaciones logísticas.
La crisis de seguridad en el transporte de mercancías en México es un reto que no puede ser ignorado. La combinación de tecnologías avanzadas y un enfoque colaborativo entre el sector privado y las autoridades es clave para reducir los robos y asegurar un futuro más seguro para el transporte de carga. La industria debe actuar con rapidez y determinación, porque cada día que pasa sin una solución efectiva es un día más en el que las empresas y la economía nacional sufren las consecuencias del crimen en las carreteras.
Fuente: Pasión Movil
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