En una alarmante denuncia que resuena con la desesperación y la frustración acumulada, los afiliados a la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas A.C. (AMOTAC) exigen acciones inmediatas para enfrentar la creciente ola de delincuencia en las carreteras del país. José Luis Guillén González, líder estatal de AMOTAC, expresó su indignación: “En lo que va del mes, tres de nuestros choferes fueron despojados de sus camiones, les quitaron la carga, los golpearon y amenazaron. Nada de los acuerdos con el Gobierno Federal se ha cumplido; al contrario, se siguen intensificando los abusos y extorsiones”.
A pesar de las continuas manifestaciones y mesas de trabajo con representantes del Gobierno Federal, Guillén González lamenta que no se han visto resultados tangibles. “Al final no se hizo nada. En este tiempo de elecciones hemos visto que se han descuidado todavía más las carreteras. Hay muy poca presencia de la Guardia Nacional, tal vez porque están cuidando a los candidatos. En las carreteras se han intensificado los robos, asaltos y extorsiones porque nadie las cuida”, subraya el líder transportista.
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Las pérdidas económicas son significativas. “Un camión con carga equivale a cinco millones de pesos, y algunos de nuestros choferes han sido golpeados”, señala Guillén González. Las rutas más peligrosas identificadas incluyen las carreteras de Torreón, Nuevo León y San Luis Potosí, donde los transportistas han sido víctimas recurrentes. Aunque en el estado de Jalisco se mantiene una relativa tranquilidad, la necesidad de salir a otras regiones expone a los transportistas a un riesgo constante.
La situación se ha agravado durante la temporada electoral, donde la atención y los recursos parecen haberse desviado hacia la protección de candidatos, dejando desprotegidas las rutas de transporte. “Esperemos que una vez que pasen las elecciones y que inicie la temporada vacacional se implementen nuevos operativos como los que se hacían con la policía estatal”, expresó Guillén González con la esperanza de ver una mejora en la seguridad vial.
La AMOTAC hace un llamado urgente a las autoridades para que no solo cumplan con los acuerdos previos, sino que también refuercen la seguridad en las carreteras. La protección de los transportistas y sus bienes es crucial para la estabilidad económica y la seguridad de miles de trabajadores que enfrentan peligros constantes en su labor diaria.
Es inaceptable que los transportistas, quienes son una parte vital de la economía mexicana, sigan siendo víctimas de la delincuencia sin que haya una respuesta efectiva por parte de las autoridades. Las promesas incumplidas y la falta de acción tangible están poniendo en riesgo no solo bienes materiales, sino también vidas humanas. Es imperativo que el Gobierno Federal priorice la seguridad en las carreteras y que la Guardia Nacional vuelva a enfocarse en su misión principal: proteger a los ciudadanos y garantizar la seguridad en las rutas de transporte.
Los transportistas no pueden seguir siendo ignorados. Necesitan soluciones ahora, no después de las elecciones, no después de más reuniones sin resultados. La seguridad en las carreteras es un derecho que debe ser garantizado para todos los ciudadanos, y es hora de que las autoridades cumplan con su deber.
La AMOTAC y sus afiliados esperan una respuesta inmediata y efectiva para frenar la ola de delincuencia en las carreteras. Las promesas deben convertirse en acciones, y la seguridad debe ser una prioridad innegociable para garantizar la protección y el bienestar de los transportistas y sus familias.
Fuente: El Sol de Centro
